Tal como prometía el artwork de la portada, tiene una gran influencia rock, a pesar de no tener una invasión de guitarras distorsionadas y que las percusiones sean más cercanas a lo digital que a lo análogo. Hasta en cierto punto, suena mas a raw demo que a una canción totalmente mezclada y ecualizada. Básicamente, si esperabas que el nuevo single de Gaga sea un nuevo club banger al mejor estilo de Poker Face, Bad Romance o Born This Way, olvidalo. No es una canción pensada para las pistas (aunque de seguro las marikotekas la tocarán hasta el hartazgo). Es una canción claramente pensada para los estadios. Para demostrar lo poderosa que es la Germanotta vocal y escenicamente. Y seguramente para desplegar un sonido de live band bien poderoso.
But the question is.... Nos olvidamos para siempre de la aspirante a heredera del trono pop? Por ahora, parece que si. La búsqueda de prestigio pudo mas esta vez. Espero con ansias tu segundo single para que me refutes mi teoría Stefani.
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